La historia de El Carmel está signada por el sacrificio: el de la inmigración andaluza, murciana o extremeña, que forjó el barrio a principios de los cincuenta y salpicó de chabolas las faldas del Turó de la Rovira. El de la actual inmigración latinoamericana, que hoy le da a sus empinadas calles una personalidad y un color característicos. O el de la incansable lucha vecinal, que, entre otras mejoras, contribuyó a que después de tantos años hubiera por fin una estación de metro.
El Carmel está atravesado de prejuicios que merecen ser desmontados. Un barrio construido con esfuerzo, pero también con gran literatura —el Pijoaparte de Juan Marsé será por siempre su hijo dilecto— y con una efervescente actividad social y cultural.
El escritor argentino Franco Chiaravalloti propone un recorrido por este barrio nacido en torno al santuario de la Virgen del Carmelo, una constante tierra de acogida plagada de historias desconocidas para la mayoría de los barceloneses, con la intención de revelar su pasado y su presente, hablar con sus protagonistas, subir cuestas, cruzar puentes, visitar asociaciones y, durante el trayecto, admirar las espectaculares vistas que desde allí pueden obtenerse de toda la ciudad.
Ruta estrenada el pasado mes de junio en el marco del KM Amèrica, el Festival de Literatura Latinoamericana de Barcelona.
NOTA: Para personas con movilidad reducida informamos que la ruta contempla escaleras y tramos con pendientes, tanto de subida como de bajada.