El director artístico costarricense Francisco Centeno-Rodríguez nos ofrece dos puestas en escena del espectáculo de danza El Encierro, interpretado por la bailarina salvadoreña y asistente de dirección Laura Benítez. La pieza, escrita por Centeno-Rodríguez durante el primer periodo de confinamiento con motivo de la expansión del Covid-19, aborda la pandemia como fenómeno social, económico, psicológico y biológico y de qué manera nos ha afectado.

Sinopsis:

Encierro: Lugar donde se encierra, retira o aparta una persona. “El hogar se convierte en un agobiante encierro entre cuatro paredes imaginarias del que a veces quisiera escapar, huir, morirse o refugiarse en otro lugar”. Encierro del alma, encierro mental, encierro de prohibiciones, encierro de una verticalidad femenina con intenciones claras de abandonar o dejar atrás los trastornos como la privación de la libertad en la que un ser permanece, voluntaria u obligadamente dentro de un recinto cerrado.

"Es de mi interés crear dentro del repertorio un espacio donde la premisa es tocar puntos álgidos que nos atañen de manera personal, social y de actualidad. En este caso propiamente me he sentido identificado para plasmar la temática que estamos hoy día viviendo como es la pandemia, un fenómeno social económico, psicológico y biológico que nos arrastra día a día en el convivir como seres humanos.

En este capítulo creativo de la obra El Encierro, intento realizar un esbozo de la parte psicológica que conlleva el estar confinado por períodos abiertos a nivel psíquico de la agresión sin necesidad de ser una violencia física; cuyo planteamiento es la violencia de la libertad de género", presenta el director Centeno-Rodríguez.