El viaje iniciático a Bolivia de Niño de Elche. Un acercamiento a distintas realidades sociales y musicales que le permite reflexionar sobre su propia vida, su personalidad, el aprendizaje de la música y la relación entre su arte y su familia.

Tras ver al cantaor Niño de Elche actuar en el Sónar, frente a un público rendido a sus pies, comienza su viaje a Bolivia. Allí conocerá a diferentes artistas, culturas y personajes que le ayudarán a confrontar sus miedos y experimentar nuevos procesos de creación musical. Adentrándose en una cultura casi desconocida para él, entiende que la experimentación puede ser la grieta liberadora para conocer los territorios inexplorados de nuestro ser, en una sociedad condicionada por los cánones y la ortodoxia.

Documental. Italia. VOSE. 85 min. Digital.

Sinopsis

A través de los recuerdos de Walter Schreifels y de su música (Gorilla Biscuits, Youth Of Today, Quicksand o Rival Schools entre otros), At The Matinée cuenta la singular historia del Lower East Side de Nueva York a finales de la década de 1980, un lugar y una época que se convirtieron en sinónimos de música hardcore, contracultura y juventud desafiante. Treinta años después, Schreifels sigue escribiendo e interpretando música que se inspira en sus raíces hardcore originales del Lower East Side. Como tal, será nuestro guía a través del barrio y de los músicos que lo formaron, ayudándonos a viajar en el tiempo a las aceras del CBGB donde cada domingo por la tarde los chicos del hardcore, skinheads y punks se alineaban en la calle esperando para sus conciertos matinales de finales de los 80. A través de la singular mirada de Schreifels, conoceremos a un variopinto elenco de personajes que también estuvieron allí y fueron influyentes en la escena, dibujando un retrato inigualable de aquella época y de cómo sigue influyendo en sus facetas creativas hasta el día de hoy. At the Matinée también nos llevará a Alemania (Berlín) e Italia (Bolonia), lugares importantes en la vida de Schreifels como músico, para examinar cómo el hardcore y su legado han dejado huella en otras partes del mundo hasta nuestros días.