Margarida Mariño presenta en su proyecto más personal un repertorio original para violoncello y voz, inspirado en temas como la ecología, el cambio climático o las migraciones humanas. Utilizando pedales de efectos, voces, loops y electrónica logra crear texturas únicas y complejas orquestaciones que dan lugar a un estilo único, en el que géneros tan aparentemente divergentes como ambient, experimental, minimalismo o la música clásica vibran con una sola voz. Desde su presentación en WOS Festival el proyecto ya ha recorrido con buena acogida teatros y salas como Prinsenkwartier en Delft, Onder aan de Dijk en Rotterdam, Teatro Colón en A Coruña, Teatro Barakaldo Antzokia o Auditorio Conde Duque en Madrid.
Nacida en Vigo y licenciada en el Conservatorio Superior Liceu de Barcelona, la trayectoria de Margarida se extiende por agrupaciones como la Orquestra Ressonnance (Suiza), La Vía dei Concerti (Italia) o la Real Filharmonía de Galicia, entre otras.
Su exploración de los límites sonoros y estéticos del violoncello la han llevado a experimentar con géneros donde su instrumento non es tan común, como el Seminario Permanente de Jazz e Improvisación Libre (SPIL). En el año 2015 fue galardonada con el dúo Treme por el premio Música Xove a la mejor banda gallega. En el año 2018 fue solista con la producción del Teatro Real, Pulcinella. Tiene dos trabajos discográficos publicados con el multiinstrumentista Fernando Barroso: Silence Lovers Club (2018) y Xograr (2020), con el trío de música clásica e contemporánea Eixos Cromáticos (2020) y con el quinteto de jazz Límbico (2021).
Ha compuesto e interpretado música original para el cine y publicidad, entre los que destacan la banda sonora del cortometraje Puzzle, de Nicolás Ferglez, o el espectáculo de danza de Alfonso Rivera, Good Luck.
